El próximo 2 de enero de 2015, la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) elegirá a su nuevo presidente y máximo representante del Poder Judicial federal.
El caso del ministro Sergio Valls como contendiente está en duda debido a su estado de salud, el cual le obligó hace unas semanas a solicitar una licencia de un mes para afrontar un grave padecimiento –hasta ahora mantenido en estricta confidencialidad—, luego de varios meses de ausencia intermitente en las sesiones públicas del pleno de la Corte y de la Segunda Sala, de la que forma parte.
De acuerdo con la Ley Orgánica del Poder Judicial de la Federación, en los primeros cinco días de diciembre próximo se conocerán los nombres, de manera oficial, de quienes aspiren a la presidencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
Si bien la elección del presidente de la Corte y de la Judicatura es un proceso interno, expertos en derecho y catedráticos de la UNAM, la Universidad Iberoamericana y el Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE) consideran que la relevancia de la designación resulta de tal magnitud que “es obligado” ventilar el tema ante toda la sociedad, porque “un déficit de la cultura democrática” en el país radica justamente en el desconocimiento de los ciudadanos respecto del Poder judicial federal, de quién interpreta la constitución y qué pretende lograr.